Con la cantidad de contenido empujado por el algoritmo en estos días, es cada vez más difícil para un joven surfista detener el desplazamiento sin sentido. Estamos adormecidos ante los Superman en Waco, las inmersiones en cuevas indonesias y las recopilaciones de los accidentes de Nazaré.

El hawaiano Jackson Bunch parece decidido a parar los pulgares y a quedar bien haciéndolo. En su vídeo de Pipeline de arriba, que se publica hábilmente en junio y no en febrero, Jackson muestra tanto la agudeza de las olas pequeñas como las bolas de bronce. Con un casco robusto, cantos rosas y muchas agallas, Jackson se balancea en las olas feas de Pipe, hace backflips en Ehukai Beach Park y aterriza y hace rotaciones completas en Rocky Point.

Editado por Jansen Souza